BELFAST.- De todas las fuerzas que concurren en el escenario del Ulster, la más veterana e importante es el "Irish Republican Army" (IRA).
El IRA del siglo XVIII eran aquellos "Defenders", "White Boys" y "Hearts of Oak", que actuaron contra el invasor, acudiendo al único recurso que éste les dejaba libre: la violencia. Y se puede reconocer el espíritu del actual IRA en los "Irish Volunteers" de 1779; en los "Right Boys" de 1786; en los "United Irishman" de 1791; en los miembros del movimiento "Joven Irlanda" de 1848; en los "Fenianns" de 1867; en la Hermandad Irlandesa, Voluntarios Irlandeses y Ejército Ciudadano Irlandés, que nacen a principios del presente siglo como respuesta a la creación, por el lider protestante Edward Carson, del ejército secreto "Ulster Volunteers".
En realidad el IRA, tal como hoy lo conocemos, se funda tras los sangrientos sucesos de la Pascua de 1916, y, mas concretamente, a partir de los restos del "Irish Republican Brotherood"; la facción ultranacionalista responsable de aquel alzamiento y cuyos siete jefes fueron pasados por las armas, victimas de la represión británica.
Fuerza admirada y honrada tras la independencia del Sur de Irlanda, que tanto contribuyó a alcanzar; su toma de posición contra quienes admiten la partición del Eire, le lleva a enfrentarse con el recién creado Gobierno de Dublín, que la acabará colocando al margen de la Ley. Pese a ello el Ejército Republicano Irlandés continuará actuando, y su hacha de guerra seguirá en alto mientras las tropas británicas sigan en tierra irlandesa.
El IRA se irá forjando día a día, sufrirá giros y reveses, pero la lucha continuará. Cuando sus miembros salen de la cárcel, muchos vuelven a la organización, pues la vida solo podrá reanudarse cuando Irlanda sea libre, cuando la guerra contra el británico haya finalizado.
La guerrilla católica, cuya popularidad es ahora inmensa, paso por un grave periodo entre enero de 1970 y agosto de 1971, cuando la organización se escindió en dos ramas: Los "oficiales" y los "provisionales". El cisma fue una cuestión de tipo político y generacional.
Los "oficiales", o "rojos", hablaban de negociaciones, de calma, de hacer que todo el entramado de la causa irlandesa pasara por un socialismo de tipo casi marxista, mientras que los "provisionales", o "verdes", exigían la actuación armada inmediata y contundente, sin bandera política alguna; sin más bandera que la de la reunificación de Irlanda.
Hacía ya algún tiempo que las divergencias de criterio, en cuanto a la actuación teórica y práctica, eran notorias en el seno del IRA. Eran tiempos en que todos los grupos que planteaban una lucha del estilo clásico de "Liberación Nacional" se acercaban al marxismo soviético, seducidos por su mensaje, que en el Eire también tenía connotaciones de lucha de clases, amén del apoyo que los soviéticos daban a este tipo de organizaciones. Pero el problema no se planteó desembocadamente hasta enero de 1970, con ocasión del congreso del Sinn Féin, partido del que el IRA es su brazo armado.
Hasta el momento, el Sinn Féin había mantenido las tesis de que no se debía dialogar con el gobierno de Dublín, ni con el de Belfast, ni con el de Londres, por tratarse de tácitos aliados, y más de lo mismo. Ahora bien, una moción solicitaba variar de política y entrar en el juego electoral de Dublín, concluyendo con la doctrina abstencionista.
Sometida a votación esa propuesta, obtuvo la mayoría necesaria de dos tercios, y en vista de ello quienes se habían opuesto a su aprobación abandonaron el Congreso, dando nacimiento, así, al "Sinn Féin"-Auténtico. Otros problemas, esta vez con los supuestos "marxistizantes" terminaron también en roturas y escisiones.
Finalmente quedó el IRA-provisional con su brazo político el Sinn Féin, que primaban la lucha armada por encima de la política, y que es el grupo que conocemos hoy día como IRA, y como Sinn Féin, siendo estos los mayoritarios.
Mientras que por otro lado quedó el IRA-oficial, que tras sufrir ciertos avatares finalmente se convirtió en el INLA (Irish National Liberation Army) y su brazo político el IRSP (Irish Republican Socialist Party), de carácter marxista, conservando la lucha armada, y que actualmente tiene una pequeña implantación, realizando en algunas ocasiones acciones armadas de cierta importancia.
Y finalmente otra sección del IRA-oficial se convirtió en el WP (Werkers Party), que es un partido de izquierda irlandesa.
Las divisiones entre los oficiales y los provisionales, y entre los que continuaron en el Sinn Féin, fueron llevadas a cabo por los mismos protagonistas, ya que la simbiosis entre IRA y el Sinn Féin es bien patente.
La gran mayoría de los actuales jefes del IRA son personas que entraron en la organización de muy jóvenes, con 14 ó 15 años, y que continúan en la lucha durante toda su vida. En muchos casos sus padres y abuelos también fueron del IRA, y ellos supieron recoger la espada que un día liberara a Irlanda de las tropas británicas.
En una entrevista concedida al periodista español José Antonio Sierra, y que fue publicada en 1971 en "El Diario Vasco", Joe Cahill, jefe de los provisionales manifestó:"El IRA-Provisional nunca ha reconocido a los gobiernos de Belfast, Londres o Dublín, ni piensa reconocerlos en el futuro hasta que no se firme un auténtico tratado de paz con la Gran Bretaña, previa condición de la retirada de las tropas británicas de Irlanda y la reunificación del país... El pueblo irlandés continuará la lucha todo el tiempo que sea necesario hasta que no quede un solo soldado británico en Irlanda y consiga la libertad total... y el IRA-provisional entiende por libertad total la consecución de la reunificación de Irlanda y de los diez puntos principales del partido Sinn Féin:1. La nacionalización de la banca y de las principales industrias del país.2. El establecimiento de relaciones comerciales con todos los paises del mundo para diversificar más nuestro comercio exterior y acabar, así, con el monopolio colonial económico de la Gran Bretaña.3. La creación de cooperativas, formadas con las industrias nacionalizadas por el Estado y en las que todos sus trabajadores tendrían acciones.4. La nacionalización y reforma de la enseñanza, para acabar con el clasismo social a través de la educación.
5. La nacionalización del suelo, en las ciudades, para acabar con la especulación actual y programar la construcción masiva de viviendas.
6. La protección de la industria pesquera nacional, vital para la economía del país.
7. El establecimiento gratuito de todos los servicios de sanidad y el perfeccionamiento de la seguridad social.
8. Imposición y enseñanza obligatoria de la lengua irlandesa -idioma nacional- en todas las escuelas, y que gradualmente iría ocupando el lugar que, hoy, tiene la lengua inglesa.
9. Formación de un Parlamento Nacional para gobernar el país, en el que estarían representados los cuatro consejos de la división provincial histórica de Irlanda: Ulster, Connacht, Leinster y Munster.
10. El establecimiento de relaciones diplomáticas con todos los paises del mundo, sin distinción de razas, religiones o sistemas políticos."
El IRA cuenta con un gran apoyo entre la población católica, y cuando uno de sus hombres cae, el calor popular le acompaña. En los entierros los féretros son cubiertos por la bandera verde, blanca y naranja; cientos de personas hacen de escolta con armas y uniformes, gaitas irlandesas emiten antiguas canciones, y miles de personas acompañan al caído al Campo Santo.
La Iglesia Católica ha condenado en algunas ocasiones las acciones del IRA, e incluso ha llegado a excomulgar a algunos de sus comandos. Aunque también es verdad que muchos sacerdotes son miembros del IRA, y que en las cárceles se encuentran arrestados algunos religiosos; pues el derecho a la rebelión, en determinados casos, se halla reconocido por la propia doctrina de la Iglesia, y ese derecho en el Ulster es incuestionable.
El mismo Vaticano no ha reconocido la partición de la isla, y considera a Irlanda como una unidad desde el punto de vista religioso.
El Sinn Féin goza de una gran popularidad, y su poder de convocatoria es enorme. Sus jefes siempre están en la primera línea, y son los encargados de dirigir al movimiento patriótico irlandés.
El líder del Sinn Féin es Gerry Adams, quien cuenta con todo el apoyo del partido. Empezó militando de joven, y sus propuestas le llevaron hace unos años a la dirección del partido. El numero dos es Martin McGuinness, quien también empezó militando en la rama juvenil del movimiento republicano.
El IRA del siglo XVIII eran aquellos "Defenders", "White Boys" y "Hearts of Oak", que actuaron contra el invasor, acudiendo al único recurso que éste les dejaba libre: la violencia. Y se puede reconocer el espíritu del actual IRA en los "Irish Volunteers" de 1779; en los "Right Boys" de 1786; en los "United Irishman" de 1791; en los miembros del movimiento "Joven Irlanda" de 1848; en los "Fenianns" de 1867; en la Hermandad Irlandesa, Voluntarios Irlandeses y Ejército Ciudadano Irlandés, que nacen a principios del presente siglo como respuesta a la creación, por el lider protestante Edward Carson, del ejército secreto "Ulster Volunteers".
En realidad el IRA, tal como hoy lo conocemos, se funda tras los sangrientos sucesos de la Pascua de 1916, y, mas concretamente, a partir de los restos del "Irish Republican Brotherood"; la facción ultranacionalista responsable de aquel alzamiento y cuyos siete jefes fueron pasados por las armas, victimas de la represión británica.
Fuerza admirada y honrada tras la independencia del Sur de Irlanda, que tanto contribuyó a alcanzar; su toma de posición contra quienes admiten la partición del Eire, le lleva a enfrentarse con el recién creado Gobierno de Dublín, que la acabará colocando al margen de la Ley. Pese a ello el Ejército Republicano Irlandés continuará actuando, y su hacha de guerra seguirá en alto mientras las tropas británicas sigan en tierra irlandesa.
El IRA se irá forjando día a día, sufrirá giros y reveses, pero la lucha continuará. Cuando sus miembros salen de la cárcel, muchos vuelven a la organización, pues la vida solo podrá reanudarse cuando Irlanda sea libre, cuando la guerra contra el británico haya finalizado.
La guerrilla católica, cuya popularidad es ahora inmensa, paso por un grave periodo entre enero de 1970 y agosto de 1971, cuando la organización se escindió en dos ramas: Los "oficiales" y los "provisionales". El cisma fue una cuestión de tipo político y generacional.
Los "oficiales", o "rojos", hablaban de negociaciones, de calma, de hacer que todo el entramado de la causa irlandesa pasara por un socialismo de tipo casi marxista, mientras que los "provisionales", o "verdes", exigían la actuación armada inmediata y contundente, sin bandera política alguna; sin más bandera que la de la reunificación de Irlanda.
Hacía ya algún tiempo que las divergencias de criterio, en cuanto a la actuación teórica y práctica, eran notorias en el seno del IRA. Eran tiempos en que todos los grupos que planteaban una lucha del estilo clásico de "Liberación Nacional" se acercaban al marxismo soviético, seducidos por su mensaje, que en el Eire también tenía connotaciones de lucha de clases, amén del apoyo que los soviéticos daban a este tipo de organizaciones. Pero el problema no se planteó desembocadamente hasta enero de 1970, con ocasión del congreso del Sinn Féin, partido del que el IRA es su brazo armado.
Hasta el momento, el Sinn Féin había mantenido las tesis de que no se debía dialogar con el gobierno de Dublín, ni con el de Belfast, ni con el de Londres, por tratarse de tácitos aliados, y más de lo mismo. Ahora bien, una moción solicitaba variar de política y entrar en el juego electoral de Dublín, concluyendo con la doctrina abstencionista.
Sometida a votación esa propuesta, obtuvo la mayoría necesaria de dos tercios, y en vista de ello quienes se habían opuesto a su aprobación abandonaron el Congreso, dando nacimiento, así, al "Sinn Féin"-Auténtico. Otros problemas, esta vez con los supuestos "marxistizantes" terminaron también en roturas y escisiones.
Finalmente quedó el IRA-provisional con su brazo político el Sinn Féin, que primaban la lucha armada por encima de la política, y que es el grupo que conocemos hoy día como IRA, y como Sinn Féin, siendo estos los mayoritarios.
Mientras que por otro lado quedó el IRA-oficial, que tras sufrir ciertos avatares finalmente se convirtió en el INLA (Irish National Liberation Army) y su brazo político el IRSP (Irish Republican Socialist Party), de carácter marxista, conservando la lucha armada, y que actualmente tiene una pequeña implantación, realizando en algunas ocasiones acciones armadas de cierta importancia.
Y finalmente otra sección del IRA-oficial se convirtió en el WP (Werkers Party), que es un partido de izquierda irlandesa.
Las divisiones entre los oficiales y los provisionales, y entre los que continuaron en el Sinn Féin, fueron llevadas a cabo por los mismos protagonistas, ya que la simbiosis entre IRA y el Sinn Féin es bien patente.
La gran mayoría de los actuales jefes del IRA son personas que entraron en la organización de muy jóvenes, con 14 ó 15 años, y que continúan en la lucha durante toda su vida. En muchos casos sus padres y abuelos también fueron del IRA, y ellos supieron recoger la espada que un día liberara a Irlanda de las tropas británicas.
En una entrevista concedida al periodista español José Antonio Sierra, y que fue publicada en 1971 en "El Diario Vasco", Joe Cahill, jefe de los provisionales manifestó:"El IRA-Provisional nunca ha reconocido a los gobiernos de Belfast, Londres o Dublín, ni piensa reconocerlos en el futuro hasta que no se firme un auténtico tratado de paz con la Gran Bretaña, previa condición de la retirada de las tropas británicas de Irlanda y la reunificación del país... El pueblo irlandés continuará la lucha todo el tiempo que sea necesario hasta que no quede un solo soldado británico en Irlanda y consiga la libertad total... y el IRA-provisional entiende por libertad total la consecución de la reunificación de Irlanda y de los diez puntos principales del partido Sinn Féin:1. La nacionalización de la banca y de las principales industrias del país.2. El establecimiento de relaciones comerciales con todos los paises del mundo para diversificar más nuestro comercio exterior y acabar, así, con el monopolio colonial económico de la Gran Bretaña.3. La creación de cooperativas, formadas con las industrias nacionalizadas por el Estado y en las que todos sus trabajadores tendrían acciones.4. La nacionalización y reforma de la enseñanza, para acabar con el clasismo social a través de la educación.
5. La nacionalización del suelo, en las ciudades, para acabar con la especulación actual y programar la construcción masiva de viviendas.
6. La protección de la industria pesquera nacional, vital para la economía del país.
7. El establecimiento gratuito de todos los servicios de sanidad y el perfeccionamiento de la seguridad social.
8. Imposición y enseñanza obligatoria de la lengua irlandesa -idioma nacional- en todas las escuelas, y que gradualmente iría ocupando el lugar que, hoy, tiene la lengua inglesa.
9. Formación de un Parlamento Nacional para gobernar el país, en el que estarían representados los cuatro consejos de la división provincial histórica de Irlanda: Ulster, Connacht, Leinster y Munster.
10. El establecimiento de relaciones diplomáticas con todos los paises del mundo, sin distinción de razas, religiones o sistemas políticos."
El IRA cuenta con un gran apoyo entre la población católica, y cuando uno de sus hombres cae, el calor popular le acompaña. En los entierros los féretros son cubiertos por la bandera verde, blanca y naranja; cientos de personas hacen de escolta con armas y uniformes, gaitas irlandesas emiten antiguas canciones, y miles de personas acompañan al caído al Campo Santo.
La Iglesia Católica ha condenado en algunas ocasiones las acciones del IRA, e incluso ha llegado a excomulgar a algunos de sus comandos. Aunque también es verdad que muchos sacerdotes son miembros del IRA, y que en las cárceles se encuentran arrestados algunos religiosos; pues el derecho a la rebelión, en determinados casos, se halla reconocido por la propia doctrina de la Iglesia, y ese derecho en el Ulster es incuestionable.
El mismo Vaticano no ha reconocido la partición de la isla, y considera a Irlanda como una unidad desde el punto de vista religioso.
El Sinn Féin goza de una gran popularidad, y su poder de convocatoria es enorme. Sus jefes siempre están en la primera línea, y son los encargados de dirigir al movimiento patriótico irlandés.
El líder del Sinn Féin es Gerry Adams, quien cuenta con todo el apoyo del partido. Empezó militando de joven, y sus propuestas le llevaron hace unos años a la dirección del partido. El numero dos es Martin McGuinness, quien también empezó militando en la rama juvenil del movimiento republicano.